La diabetes en perros es una enfermedad cada vez más común, especialmente en perros mayores y perros obesos.
La diabetes canina es similar a la diabetes tipo 1 en humanos, donde el cuerpo no produce suficiente insulina para regular los niveles de glucosa en sangre.
Es realmente necesario que los adoptantes se eduquen al respecto, puesto a que afecta a muchas mascotas en muchos lugares del mundo.
Sin duda ninguna, la detección temprana y el tratamiento adecuado son esenciales para garantizar que tu perro mejore y tenga una buena calidad de vida.
¿Qué es la diabetes canina?
Normalmente, el organismo del perro produce insulina.
La insulina es una hormona que ayuda a regular el azúcar, pero cuando tienen diabetes, no la produce de manera suficiente.
Es importante mencionar que se trata de una dolencia que requiere de un tratamiento de por vida, y si no se controla adecuadamente, puede provocar problemas de salud graves en tu perro.
Este aumento que ocurre con los niveles de azúcar puede dañar los órganos y los tejidos con el paso del tiempo.
Además, todo esto trae como consecuencias otras complicaciones como las cataratas y enfermedades renales.
También hay más riesgo de que tengan infecciones recurrentes, problemas cardiovasculares, coma y, en casos graves y no tratados, la muerte del perro.
Nota: La esperanza de vida de un perro con diabetes depende de varios factores como la edad, su estado de salud general, la gravedad, y si se maneja adecuadamente con un veterinario.
Con un diagnóstico temprano y un tratamiento adecuado, muchos llegan a vivir una vida larga y saludable.
Causas de la diabetes en perros
Hay varios factores que facilitan el desarrollo de diabetes en perros:
- Edad: es más común en perros mayores de 5 años.
- Obesidad: esta puede acrecentar las posibilidades de diabetes debido a que aumenta la resistencia a la insulina.
- Genética: algunas razas son más propensas a desarrollarla, como el Schnauzer, Poodle, Beagle, Dachshund, Labrador Retriever, entre otros.
- Enfermedades endocrinas: otras hormonales como el hipotiroidismo o Cushing, pueden aumentar el peligro de padecerla.
- Algunos medicamentos: por ejemplo, los esteroides, pueden aumentar las posibilidades de que tenga diabetes.
¿Cómo saber si tu perro tiene diabetes?
Muchos perros no manifiestan ningún tipo de síntoma, al menos que ya lleven tiempo la enfermedad en su organismo.
Por lo tanto, ante la presencia de algunos síntomas, es necesario que el adoptante esté alerta para que accione rápidamente con el médico experto.
Los síntomas más evidentes, son los siguientes:
- Aumento de la sed y la micción: Puede mostrar una necesidad excesiva de beber agua y orinar con más frecuencia de lo normal.
- Pérdida de peso: A pesar de que tienen un aumento del apetito, llegan a perder peso debido a que no puede utilizar la glucosa de manera adecuada.
- Apatía o fatiga: Manifiestan tener menos actividad y se ven más cansados. Esto se debe a que no están obteniendo suficiente energía de la glucosa.
- Cambios en la visión: Puede causar la formación de cataratas. Por lo tanto, llega a afectar su visión y hacer que tenga dificultades para ver.
- Infecciones frecuentes: Debilita el sistema inmunológico de tu mascota, lo que lo hace más propenso a desarrollar infecciones urinarias o incluso de su piel.
- Vómitos y diarrea: En casos avanzados de diabetes, pueden presentar ambos síntomas, debido a la acumulación de ácidos.
- Su pelaje no se ve bien y tiene mal aspecto.
- En caso de presentar heridas en su piel, no cicatrizan bien.
Nota: Es importante tener en cuenta que algunos de estos síntomas pueden ser causados por otras dolencias, por lo que es responsable consultar con un experto canino.
Un diagnóstico temprano y un tratamiento adecuado pueden ayudar a controlarla y prevenir que ocurran algunas posibles complicaciones.
Tipos de diabetes en perros
Como pasa con nosotros los humanos, nuestros perros pueden sufrir de dos tipos de diabetes.
Diabetes tipo 1
Es una enfermedad que ocurre por una falta de producción de insulina en el cuerpo del animal.
Recordemos que es una hormona la cual es producida por el páncreas, que ayuda a regular los niveles de azúcar en la sangre.
En la diabetes tipo 1, el sistema inmunológico ataca y destruye las células que se encuentran dentro del páncreas.
Los síntomas comunes incluyen aumento de la sed y de las ganas de orinar, pérdida de peso a pesar de un aumento del apetito, fatiga, debilidad y cambios en la visión.
El tratamiento generalmente implica inyecciones diarias de insulina y cambios en la dieta y el ejercicio.
El objetivo es mantener el azúcar dentro de un rango saludable.
Diabetes tipo 2
Es otra forma de diabetes que se caracteriza por una resistencia a la insulina.
El perro la produce, pero no puede usarla adecuadamente con la finalidad de regular el azúcar en su sangre.
Esta es menos común que la tipo 1 y habitualmente se desarrolla en los que perros mayores y perros obesos o con sobrepeso.
En cuanto a los síntomas, son similares a los del tipo 1 y pueden incluir aumento de la sed y de la micción, pérdida de peso, fatiga y debilidad.
Para tratarla, hay que hacer cambios en la dieta y el ejercicio.
De igual manera, son necesarios los remedios orales. En algunos casos, se puede requerir inyectable para controlarla mejor.
¿Qué es la diabetes insípida?
La diabetes insípida es una diabetes muy rara en perros y es causada por una deficiencia en la producción o la acción de la hormona antidiurética (ADH).
Esta es la responsable de regular la cantidad de agua.
Los síntomas incluyen una sed excesiva y micción frecuente y abundante.
La mascota puede mostrar signos de deshidratación si no se reemplaza el agua perdida.
El tratamiento implica el reemplazo de la hormona ADH que falta.
En algunos casos, esto puede lograrse mediante el uso de medicinas que imitan la acción, mientras que en otros puede requerirse el uso de la hormona ADH sintética.
¿Cómo se diagnostica la diabetes en perros y cuál es su tratamiento?
El médico veterinario es el único profesional responsable de la salud canina y, por lo tanto, es el único que pueden emitir un diagnóstico acertado.
Por ese motivo, nunca automediques a tu mascota.
Si sospechas que tu perro tiene diabetes, el primer paso es acudir a la consulta.
Recuerda todos los síntomas posibles para que le indiques detalles al médico.
Si es posible, llévalos todos anotados. El más importante es el aumento de ingesta de agua, o que esté apático.
Seguidamente el experto debe proceder a hacer un examen físico para determinar su estado de salud general.
Luego debe extraer sangre y una muestra de orina para conocer los niveles de azúcar. También es recomendable que se mida la frustosamina.
Si el azúcar es elevado, el médico debe realizar una medición de la presión sanguínea y realizar un examen ocular, debido al riesgo de las cataratas ante la presencia de la diabetes canina.
El tratamiento implica una combinación de cambios en el estilo de vida y medicamentos.
Los objetivos son mantener los niveles de azúcar en la sangre dentro de un rango normal y prevenir o tratar las complicaciones que trae como consecuencia.
Por ello, es significativo lo siguiente:
- El veterinario experto de confianza, puede recomendar una dieta baja en carbohidratos, alta en proteínas y alta fibra para que alimentes a tu mascota como debe ser.
- El ejercicio regular ayudará a mejorar la sensibilidad a la insulina y a controlar los niveles de azúcar, para que estos sean los adecuados.
- Muchos de los que tienen diabetes necesitan inyecciones diarias de insulina. El médico puede enseñarte cómo administrarla correctamente.
- Muchas veces es necesario medir el nivel del azúcar en casa de manera regular para llevar un control cada día. En muchos de estos casos, los veterinarios pueden proporcionar un glucómetro y enseñar a usarlo.
Enfermedades que son consecuencia de la diabetes en perros
Cuando la diabetes no se trata correctamente, a tiempo, o se complica, puede derivar a otras dolencias como las que mencionaremos a continuación.
- Cataratas: Son una condición ocular común en la que el cristalino del ojo se vuelve opaco, y esto afecta la visión. Pueden ser causadas por una variedad de factores, como la edad, genética, problemas metabólicos, lesiones en los ojos, entre otros.
- Hipoglucemia: Es una condición en la que el nivel de azúcar en la sangre cae por debajo de lo normal. Puede ser causada por una variedad de factores, como una sobredosis de insulina, el ayuno prolongado, el ejercicio excesivo, la enfermedad hepática o la diabetes no tratada. Los síntomas son debilidad, mareo, temblores, convulsiones y coma. Esta puede ser tratada por un veterinario con una inyección de glucosa o mediante la administración de alimentos o líquidos que contengan azúcar. Es de vital importancia buscar atención veterinaria inmediata si se sospecha debido a que puede ser una emergencia médica potencialmente mortal.
- Cetoacidosis: Se trata de una complicación grave de la denominada diabetes mellitus que ocurre cuando el cuerpo del animal comienza a quemar grasas en lugar de glucosa como fuente de energía. Cuando esto ocurre, se producen productos de desecho llamados cetónicos, que pueden acumularse en la sangre. Esta generalmente ocurre en aquellos con diabetes no tratada o mal controlada, y puede ser desencadenada por una dolencia o lesión concurrente. Los síntomas pueden incluir vómitos, diarrea, falta de apetito, debilidad, letargo, respiración rápida y profunda. También los adoptantes pueden llegar a notar la presencia de un olor dulce o afrutado en el aliento de su amigo de cuatro patas. Para tratarla, es necesaria la hospitalización para administrarle correctamente fluidos y otros medicamentos. Se pueden realizar pruebas de sangre frecuentes para monitorear la respuesta al tratamiento y asegurarse de que no haya complicaciones.
La alimentación en la diabetes canina
La alimentación adecuada es muy necesaria y tiene gran importancia, debido a que puede ayudar a controlar el azúcar, pero también, al mismo tiempo, ayuda a reducir los síntomas que muchas mascotas manifiestan.
Los alimentos recomendados, son:
- La carne magra, como pollo, pavo, pescado y carne de res magra. Estas proporcionan proteínas que requiere para su nutrición.
- Los vegetales sin almidón, como la espinaca, la col rizada, el brócoli y la calabaza, son una rica fuente de fibra y nutrientes que todos necesitan.
- Los alimentos ricos en grasas saludables, como el aceite de pescado y el aceite de coco, brindan ácidos grasos omega-3 y otros nutrientes que son muy vitales para ellos.
- Los alimentos bajos en carbohidratos, como el queso, el yogur natural y los huevos, ofrecen una adecuada ingesta de proteínas y grasas.
Nota: Es prudente evitar dar golosinas y alimentos con alto contenido de carbohidratos, como pueden ser el pan y el arroz.
En ese sentido, los adoptantes deben tener cuidado de los premios que le ofrecen, para no darles algo que no sea saludable para ellos.
¿Es importante el ejercicio en los perros con diabetes?
El ejercicio es realmente necesario siempre, debido a que así pueden consumir energía y evitar la hiperglicemia.
Una buena rutina también ayuda al aumento del flujo de la sangre y eso favorece a la absorción de la insulina en todo su organismo.
Se recomiendan paseos regulares todos los días. Por supuesto, sin excederse. Si no sabes bien qué tanto tiempo y frecuencia debes hacerlo, tu veterinario habitual o de confianza, podrá indicarte el adecuado que necesita, para que el ejercicio sea realmente favorable para su recuperación.
Breve conclusión
Muchos adoptantes se preguntan si es posible evitar o prevenir la enfermedad, pero la respuesta es que no, debido a que es casi imposible prevenirla.
Por supuesto, siguiendo los consejos de una buena alimentación, ejercicios regulares y el seguimiento con un médico experto, tu mascota puede mejorar mucho y tener la calidad de vida que quieres que tenga y que merece tener.
Siempre es importante que el adoptante se involucre en todo el proceso, aprenda sobre el tema, y esté siempre atento a los síntomas y a la evolución de su perro.
Adoptar es una responsabilidad y su salud es parte de ello.
Diabetes en perros: causas y tratamiento
La diabetes en perros es una enfermedad cada vez más común, especialmente en perros mayores y perros obesos.
La diabetes canina es similar a la diabetes tipo 1 en humanos, donde el cuerpo no produce suficiente insulina para regular los niveles de glucosa en sangre.
Es realmente necesario que los adoptantes se eduquen al respecto, puesto a que afecta a muchas mascotas en muchos lugares del mundo.
Sin duda ninguna, la detección temprana y el tratamiento adecuado son esenciales para garantizar que tu perro mejore y tenga una buena calidad de vida.
¿Qué es la diabetes canina?
Normalmente, el organismo del perro produce insulina.
La insulina es una hormona que ayuda a regular el azúcar, pero cuando tienen diabetes, no la produce de manera suficiente.
Es importante mencionar que se trata de una dolencia que requiere de un tratamiento de por vida, y si no se controla adecuadamente, puede provocar problemas de salud graves en tu perro.
Este aumento que ocurre con los niveles de azúcar puede dañar los órganos y los tejidos con el paso del tiempo.
Además, todo esto trae como consecuencias otras complicaciones como las cataratas y enfermedades renales.
También hay más riesgo de que tengan infecciones recurrentes, problemas cardiovasculares, coma y, en casos graves y no tratados, la muerte del perro.
Nota: La esperanza de vida de un perro con diabetes depende de varios factores como la edad, su estado de salud general, la gravedad, y si se maneja adecuadamente con un veterinario.
Con un diagnóstico temprano y un tratamiento adecuado, muchos llegan a vivir una vida larga y saludable.
Causas de la diabetes en perros
Hay varios factores que facilitan el desarrollo de diabetes en perros:
¿Cómo saber si tu perro tiene diabetes?
Muchos perros no manifiestan ningún tipo de síntoma, al menos que ya lleven tiempo la enfermedad en su organismo.
Por lo tanto, ante la presencia de algunos síntomas, es necesario que el adoptante esté alerta para que accione rápidamente con el médico experto.
Los síntomas más evidentes, son los siguientes:
Nota: Es importante tener en cuenta que algunos de estos síntomas pueden ser causados por otras dolencias, por lo que es responsable consultar con un experto canino.
Un diagnóstico temprano y un tratamiento adecuado pueden ayudar a controlarla y prevenir que ocurran algunas posibles complicaciones.
Tipos de diabetes en perros
Como pasa con nosotros los humanos, nuestros perros pueden sufrir de dos tipos de diabetes.
Diabetes tipo 1
Es una enfermedad que ocurre por una falta de producción de insulina en el cuerpo del animal.
Recordemos que es una hormona la cual es producida por el páncreas, que ayuda a regular los niveles de azúcar en la sangre.
En la diabetes tipo 1, el sistema inmunológico ataca y destruye las células que se encuentran dentro del páncreas.
Los síntomas comunes incluyen aumento de la sed y de las ganas de orinar, pérdida de peso a pesar de un aumento del apetito, fatiga, debilidad y cambios en la visión.
El tratamiento generalmente implica inyecciones diarias de insulina y cambios en la dieta y el ejercicio.
El objetivo es mantener el azúcar dentro de un rango saludable.
Diabetes tipo 2
Es otra forma de diabetes que se caracteriza por una resistencia a la insulina.
El perro la produce, pero no puede usarla adecuadamente con la finalidad de regular el azúcar en su sangre.
Esta es menos común que la tipo 1 y habitualmente se desarrolla en los que perros mayores y perros obesos o con sobrepeso.
En cuanto a los síntomas, son similares a los del tipo 1 y pueden incluir aumento de la sed y de la micción, pérdida de peso, fatiga y debilidad.
Para tratarla, hay que hacer cambios en la dieta y el ejercicio.
De igual manera, son necesarios los remedios orales. En algunos casos, se puede requerir inyectable para controlarla mejor.
¿Qué es la diabetes insípida?
La diabetes insípida es una diabetes muy rara en perros y es causada por una deficiencia en la producción o la acción de la hormona antidiurética (ADH).
Esta es la responsable de regular la cantidad de agua.
Los síntomas incluyen una sed excesiva y micción frecuente y abundante.
La mascota puede mostrar signos de deshidratación si no se reemplaza el agua perdida.
El tratamiento implica el reemplazo de la hormona ADH que falta.
En algunos casos, esto puede lograrse mediante el uso de medicinas que imitan la acción, mientras que en otros puede requerirse el uso de la hormona ADH sintética.
¿Cómo se diagnostica la diabetes en perros y cuál es su tratamiento?
El médico veterinario es el único profesional responsable de la salud canina y, por lo tanto, es el único que pueden emitir un diagnóstico acertado.
Por ese motivo, nunca automediques a tu mascota.
Si sospechas que tu perro tiene diabetes, el primer paso es acudir a la consulta.
Recuerda todos los síntomas posibles para que le indiques detalles al médico.
Si es posible, llévalos todos anotados. El más importante es el aumento de ingesta de agua, o que esté apático.
Seguidamente el experto debe proceder a hacer un examen físico para determinar su estado de salud general.
Luego debe extraer sangre y una muestra de orina para conocer los niveles de azúcar. También es recomendable que se mida la frustosamina.
Si el azúcar es elevado, el médico debe realizar una medición de la presión sanguínea y realizar un examen ocular, debido al riesgo de las cataratas ante la presencia de la diabetes canina.
El tratamiento implica una combinación de cambios en el estilo de vida y medicamentos.
Los objetivos son mantener los niveles de azúcar en la sangre dentro de un rango normal y prevenir o tratar las complicaciones que trae como consecuencia.
Por ello, es significativo lo siguiente:
Enfermedades que son consecuencia de la diabetes en perros
Cuando la diabetes no se trata correctamente, a tiempo, o se complica, puede derivar a otras dolencias como las que mencionaremos a continuación.
La alimentación en la diabetes canina
La alimentación adecuada es muy necesaria y tiene gran importancia, debido a que puede ayudar a controlar el azúcar, pero también, al mismo tiempo, ayuda a reducir los síntomas que muchas mascotas manifiestan.
Los alimentos recomendados, son:
Nota: Es prudente evitar dar golosinas y alimentos con alto contenido de carbohidratos, como pueden ser el pan y el arroz.
En ese sentido, los adoptantes deben tener cuidado de los premios que le ofrecen, para no darles algo que no sea saludable para ellos.
¿Es importante el ejercicio en los perros con diabetes?
El ejercicio es realmente necesario siempre, debido a que así pueden consumir energía y evitar la hiperglicemia.
Una buena rutina también ayuda al aumento del flujo de la sangre y eso favorece a la absorción de la insulina en todo su organismo.
Se recomiendan paseos regulares todos los días. Por supuesto, sin excederse. Si no sabes bien qué tanto tiempo y frecuencia debes hacerlo, tu veterinario habitual o de confianza, podrá indicarte el adecuado que necesita, para que el ejercicio sea realmente favorable para su recuperación.
Breve conclusión
Muchos adoptantes se preguntan si es posible evitar o prevenir la enfermedad, pero la respuesta es que no, debido a que es casi imposible prevenirla.
Por supuesto, siguiendo los consejos de una buena alimentación, ejercicios regulares y el seguimiento con un médico experto, tu mascota puede mejorar mucho y tener la calidad de vida que quieres que tenga y que merece tener.
Siempre es importante que el adoptante se involucre en todo el proceso, aprenda sobre el tema, y esté siempre atento a los síntomas y a la evolución de su perro.
Adoptar es una responsabilidad y su salud es parte de ello.
Felix Munoz